El autoconsumo reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, mejora la eficiencia energética, ahorra divisas que no habrá que enviar a potencias extranjeras para pagar combustibles fósiles (kilovatio hora que Canarias genere con el sol; kilovatio hora que no habrá de producir quemando gasóleo) y descentraliza la producción de energía en el archipiélago, que es un territorio fragmentado por definición.
Menos CO2, menos gasto (económico), más eficiencia (energética), descentralización en un "territorio alejado, insular y fragmentado". Esos son algunos de los argumentos que el Gobierno de Canarias puso ayer sobre la mesa durante la presentación de la jornada «Retos de la Energía Fotovoltaica en Canarias», que ha organizado la Unión Española de Fotovoltaica (UNEF) con el objetivo de "analizar la evolución y el futuro" de esta fuente renovable de energía. Participó en ese foro el viceconsejero de Industria, Energía y Consumo del Gobierno canario, Adrián Mendoza, que quiso ayer recalcar -informa el Ejecutivo regional- la necesidad de impulsar el autoconsumo de energía FV "como fuente de energía renovable y como una medida para mejorar la eficiencia energética y para descentralizar la producción de energía en las islas".
Exención permanente, como permanente es la singularidad de un territorio ultraperiférico
En ese sentido, y según informa en nota de prensa el Ejecutivo canario, "una vez que se cierre la configuración del próximo Gobierno de España", la Consejería de Economía va a pedir una reunión con el Ministerio de Industria "para conseguir eximir a Canarias de manera permanente de tener que pagar peaje por el autoconsumo energético de renovables". Hasta ahora, las islas han estado exentas "de manera transitoria" de esta obligación; pues bien, la Consejería va a pedir que ese trato diferenciado se mantenga "de manera permanente".
Sodecan
El viceconsejero de Industria, Energía y Consumo del Gobierno canario ha recordado que la Consejería de Economía, a través de la Sociedad de Desarrollo de Canarias, ha abierto en 2016 una línea de préstamos a pymes y autónomos para que desarrollen proyectos en autoconsumo y eficiencia energética, a la que se pueden acoger las instalaciones fotovoltaicas. En concreto -informa el Gobierno canario-, se trata de "préstamos a 10 años con un tipo de interés bajo, cuyo importe puede ascender hasta el 85% de la inversión total del proyecto, que deberá situarse entre los 35.000 euros de mínima y los 1,2 millones de euros de máximo".
Sistema específico para un territorio muy singular
Mendoza explicó ayer además que su gobierno negociará con el Ministerio de Industria un sistema específico para las Islas que garantice la estabilidad de las inversiones en fotovoltaica. Así, dijo que la Consejería de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento que dirige pedirá al Gobierno de España "que modifique el actual sistema de retribución que rige la instalación de energía fotovoltaica en las islas con el objetivo de ajustarlo a las peculiaridades específicas del mercado regional, incrementar el grado de penetración de las energías renovables en Canarias y conseguir consolidar un sistema de retribución estable y diferenciado para la energía fotovoltaica de las islas".
Diferenciado del resto del país
En concreto, y según informa en nota de prensa el Gobierno de Canarias, la Consejería de Economía quiere modificar la legislación que regula la producción de energía a partir de fuentes renovables "para cambiar el sistema de subasta por el que se rige hoy en día la retribución de energía eólica y fotovoltaica en las islas por un sistema retributivo estable y diferenciado al del resto del país, que garantice la estabilidad de los inversores y tenga en cuenta los altos costes que se derivan de su condición de territorio alejado, insular y fragmentado" (la isla canaria más próxima al continente africano es Fuerteventura, que se halla a unos cien kilómetros de las costas del Sáhara; el archipiélago dista más de 1.700 kilómetros de Tarifa, en el extremo sur de la Península).
Canarias quiere duplicar la generación de electricidad de origen solar
Según el viceconsejero Mendoza, "la definición de este nuevo sistema, por el que se podrá garantizar una retribución específica para un cupo determinado de energía fotovoltaica, contribuirá a que Canarias pueda alcanzar los 368 megavatios hora [MWh] de producción de energía FV que se fijan para el año 2020 en las Directrices de Ordenación Sectorial de Energía". Esta cantidad -informa el Gobierno canario- supone algo más del doble de los 177 MWh que alcanza la producción fotovoltaica en la actualidad. Según la viceconsejería, también se quiere primar, a través de esta modificación, "la eficiencia energética por encima de otros criterios, como el coste de producción". El objetivo es -explica el Ejecutivo insular- que las nuevas instalaciones contribuyan de manera más efectiva a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en Canarias y a independizar el archipiélago del exterior (actualmente alrededor del 95% de la energía que demanda Canarias -fuelóleo, gasóleo, diésel, gas- procede de allende las islas).
